Siguiendo a la luna no llegaré lejos.

Bien, aunque nadie lo sepa, Zio tiene dos escondites muy buenos en todo el edificio de la Academia. Uno, es aquel que sólo Kayros, León y Lyam conocen, en el cual se guardan las mayores reservas de alcohol del lugar.

El otro, es aquella puerta trampa del sótano, que realmente aún no ha descubierto si alguien más la conoce. Cuando quiere estar sola, cuando está deprimida, o simplemente cuando quiere gritar a las paredes sin que la molesten -sí, está loca y lo sabe- la rubia acude allí.

Y es por eso que se está percatado de que nadie la veabajar las escaleras que dirigen al sótano, crujientes y en mal estado.



-Todos los locos de la Zona de Aburridos -

Thadeo estaba aburrido de permanecer en su cuarto pues ya había ordenado todas sus ropas y esperado a su compañera para saludarla pero allí no apareció nadie por lo que decidió investigar por su cuenta el lugar. Caminaba solo hasta que vio a una chica rubia atravesar rápidamente el lugar como si algo le persiguiese o le pasase algo por lo que decidió perseguirla, quizás socorrerla aunque realmente no pensó las razones del por qué seguía sus pasos simplemente se sentía atraido.
Vio una puerta contra el suelo cerrarse y sin pensarlo dos veces la abrió y bajo las escaleras.

Raissa siempre ha tenido la camaleónica capacidad de pasar desapercibida en la mayoría de los ambientes, quizá por ser algo pequeña y vestir generalmente colores oscuros, quizá porque realmente no quería que la vieran. El caso es que lleva algunos minutos ya detrás de Zio sin que ella la sienta siquiera, se cruzó con ella en un pasillo escaleras arriba y algo en su actitud le provoco esa demencial necesidad de averiguar que se traía entre manos. Porque cuando veía así a su amiga - y esto lo decía conociendola- era porque se traía ALGO entre manos. Caminó detrás de ella hasta el fin del pasillo y, ocultandose en una curva, vio como abría una puerta trampa y bajaba por una crujiente escalera. No lo dudo un segundo, entró allí detrás de ella dejando en el pasillo toda la disimulación.

Caminando por el colegio, llegue a un lugar raro, y pense que nadie mas lo conocia, pero al parecer estaba equivocada, vi como Zio iba a ese lugar y seguido de ella una chica, sin mas pense que pasa algo extraño y enseguida corri hacia ellos baje las escaleras, vi como se abrio la puerta y se volvio a cerrar y sin pensarlo entre.. Habia varias personas hay dentro ya..

- Emm.. Hola- sonrei de lado algo nerviosa, entre algo desesperada al igual que todos que se veian entre ellos con caras raras

Bajó las escaleras hasta toparse con un grupo de gente, por lo visto todas chicas lo que incomodó un poco a Thad pero supo disimular con una nerviosa sonrisa.
-Hola, parece que esto es un punto de reunión.-dijo decidiendo ser simpático pues era el nuevo del centro

Los ojos de Thad se fijaron en las tres invitadas que rompían el silencio del sótano o al menos dos de ellas sí lo hacían mientras que la tercera, una chica rubia y radiante tan solo se inclinaba con cara de pocos amigos. Yo tan solo me limité a fingir una sonrisa dedicada a ella para intentar que no se sintiese así.

Sabía que había hecho un ruido infernal con sus pasos en la vieja escalera, percibió también lo gélido en la mirada de su amiga y la incomodidad del único chico presente alli, tanto como la simple indiferencia de otra chica que no conocía. Apenas se dio cuenta de que había más gente allí tras el saludo de ellos, un tanto nerviosos otro tanto confusos. Confusos como estaba ella también.
- Claramente nadie se esperaba esto, ¿Me equivoco? - dice con una risita mirando a Zio.

Me puse nerviosa, y que más yo solo pensaba que algo habia pasado, vi la cara de enojo de la rubio, y la de confusion de los otros dos chicos y de la mia tambien

-No, yo no lo esperaba..- dije enseguida- Perdón por entrar asi, pero pense que paso algo ..- dije enseguida tratando de explicarme

El único chico y el más tímido se encoge de hombros ante las presentaciones y decide hablar.
-Yo soy Thadeo, pero podéis llamarme Thad. Acabo de llegar nuevo-esta vez mira a Zio.-Estaba paseando, conociendo un poco el edificio, pues soy nuevo, cuando te vi. Pensaba que tenías problemas aunque alegro de que no sea así.Comentó en bajito pero claramente como dándole una explicación a todas ellos y sintiéndose ridículo al segundo de su postura y la situación, cuatro personas en un sótano, lo que le provocó una sincera sonrisa.

No se le daban del todo las formalidades y, por mucho que lo intentara, le era extremadamente dificil resultar sincera, pero de todos modos asumió que era su turno de las presentaciones.
- Brooks, un gusto - dice con una sonrisita algo amarga, no era en realidad un ser social por lo que no tenía porqué ser cálida con todo el mundo. No se sentía incómoda, una situación debía ser extremadamente tensa para conseguir aquello, pero la mirada gélida de su mejor amiga sobre si no le gustaba ni un poco -, ¿Te pasa algo, Zio? - pregunta, retórica. Sabía muy bien que no estaba para nada alegre con aquello, y distinguía a años luz que su humor no era el mejor.

Escuche cada uno de sus nombres ..- Soy Samantha, pueden decirme Sam- sonrei de lado, tratando de ser un poco mas sociable con la gente, me costaba mucho pero igual lo intente, el lugar se puso algo tenso, y senti que realmente no encajaba en ese lugar, lo vi en la mirada de la rubia..- Yo, realmente lo siento, no pensaba interrumpir o interpornerme en algo..- dije nerviosa y me fui acercando otra vez a la puerte lo mejor iba ser que me vaya.. si eso era lo mejor

Thad se relaja con la sonrisa de Zio pero aún así decide que debe irse para dejarles en intimidad y por otro lado poder encontrar su habitación. Si recordaba el camino de regreso.
-Zio, Brooks, Sam ha sido un placer conoceros pero ahora me tengo que ir. Espero coincidir pronto.-Dijo mientras se despegaba de la pared y se dirigía hacia la puerta para volverse y añadir.-Es la primera vez que hablo con alguien de aquí, acabo de llegar de Australia y debo deciros que ha sido un placer conocerlas.
Dicho aquello se marchó volviéndo sobre sus pasos e intentando no pensar mucho en lo que había sucedido y las diferentes sensaciones y opiniones, luego le dedicaría su tiempo.

*Rol off: me despido porque me voy a dormir, aca es muy tarde.

Saluda a Thad con apenas un movimiento de la cabeza cuando él ya salía por la puerta. Vaya visita fugaz. Pero ella se proponía quedarse allí un buen rato, no se encerraba en ese maldito edificio para ver correr las ratas, quería hacer algo, algo divertido.
- No es ninguna novedad si comento lo aburrido que es este lugar, ¿No? - murmura, cambiando totalmente el rumbo. Pero la frase que Zio le había dejado en el aire aún zumbaba en su cabeza. Ella la conocía, podía no ser algo importante generalizando, pero sabía que acabaría hablando de aquello que le sucedía, fuera lo que fuese.

Sonreí de lado con lo que comento Raissa.? Si recordaba bien ese era el nombre, igual tenía esa sensación de que no encajaba, pero no sabía qué hacer, si que darme o ir, si me quedaba que daba como un mal trió y si me iba me iba aburrir.. no sabía qué hacer bien, tenía que decidirme y rápido